EFM 8 - Olympic Vallès 3

Comenzaba la Liga Clausura 2014 y la EFM debutaba frente al farolillo rojo de la anterior competición. El ambiente antes del partido era bueno, ya que los enfrentamientos con Olympic Vallès se contaban por victorias, y este partido no iba a ser menos. El juego desplegado por nuestro equipo, su actitud y su definición de cara a portería le reivindican como un claro aspirante a llevarse esta nueva y corta liga.

Los manatís llevaron la iniciativa y controlaron el partido desde el minuto 0 ante un rival que presionaba poco la salida de balón y dejaba jugar, un terreno en el que nuestras vacas marinas se mueven nadan perfectamente.

Con el partido recién empezado, Olympic cometió falta en el borde izquierdo de su propia área. Toni, el gran capitán del equipo, brazalete en ristre, se aproximó para lanzar la falta, miró al portero, miró al balón y se sacó de las botas un tiro imparable ajustado al palo. 1 - 0 y estreno goleador particular.

Pocas jugadas después Olympic dio la sorpresa e igualó de nuevo el marcador en una jugada algo confusa que cogió a la EFM desprevenida, aunque este resbalón no hizo perder ni la serenidad al equipo ni el hambre de gol de Andi, que al final sería el hombre más decisivo del partido al devolver a Olympic a la cruda realidad con un par de buenas jugadas bien finalizadas sumando así sus 2 primeros goles de la tarde.

Y aunque nuestro equipo aun tuvo muchas y muy buenas ocasiones para seguir ampliando la diferencia, el 3-1 fue el resultado con el que se llegó al final del primer tiempo.

El segundo tiempo empezó con un susto: Olympic sacó de centro, colgó el balón al área y uno de sus jugadores pudo contactar bien con el palo y enviarla a las redes. Era el 3-2.

En ese momento la EFM fue consciente de que había que matar el partido, metió una marcha más y desde se momento hasta el final el encuentro fue un monólogo azulón.

Perico, que jugaba tocado, fue el autor del cuarto tanto al cazar un despeje en el área pequeña.

Andi consiguió su hat-trick al transformar un penalti chutado con su inconfundible uña-style. Era el 5-2.

Héctor también quería sumarse al festival goleador y transformó el 6-2 para mantenerse vivo en la carera del pichichismo.

Entre tanto festival manatí, Olympic anotó su tercer gol de la tarde, que a la postre no le serviría para nada. 6-3.

En otro arreón marino la defensa de Olympic volvió a cometer penalti, y esta vez la oportunidad de lanzarlo fue para nuestro gato, Álex, que no la desaprovechó, y se convierte así en el portero más goleador de la historia de la EFM. 7-3.

Y la cuenta goleadora la cerró Sergio, que parece que va despertando su instinto goleador en este último tramo liguero.

Al final fueron 8 pero pudieron ser 10 o 12, tal fue la superioridad de nuestro conjunto, aunque también hay que decir que pocos rivales se lo pondrán tan fácil de aquí en adelante.

La semana que viene espera Tocaitos, y un rumor flota en el ambiente sobre la posible vuelta de Leños... El domingo se verá.